La relación entre los gobernadores y el gobierno nacional atraviesa su momento más tenso. Este lunes, durante una reunión en el Consejo Federal de Inversiones (CFI), los representantes provinciales enfrentaron sin rodeos al secretario de Hacienda, Carlos Guberman, y al secretario de Interior, Lisandro Catalán, por la falta de fondos que, según denuncian, la Nación les está reteniendo de manera injustificada. El gobernador de la provincia, Raúl Jalil, estuvo presente en la reunión.
La principal queja gira en torno a los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), que históricamente se reparten para asistir financieramente a las provincias. Los mandatarios acusan al gobierno de Javier Milei de “robarse” esos fondos y de negarse sistemáticamente a discutir alternativas que permitirían girar recursos sin comprometer las metas fiscales.
“Propusimos eliminar los fondos fiduciarios, como amenazó el propio Milei el año pasado, y no nos supieron responder”, contó un gobernador al sitio La Política Online tras el encuentro. Para los mandatarios, estos fondos son un foco de opacidad y corrupción, por lo que no entienden la negativa del Ejecutivo a avanzar en su eliminación.
Una de las propuestas presentadas fue que la Nación coparticipe a las provincias la mitad del remanente del fondo de ATN. Sin embargo, se encontraron con un muro: “Tendrían que reconocer que se los están robando y por eso no quieren tocar nada”, lanzó con dureza uno de los gobernadores presentes.
Tampoco hubo respuesta clara respecto al reclamo por los fondos recaudados mediante el Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL), que, aseguran, el gobierno no está ejecutando ni distribuyendo como corresponde. “No pedimos nada extra, sólo que se discuta la distribución de lo que ya existe”, fue otra de las quejas.
La tensión creció aún más cuando, mientras se desarrollaba la reunión en el CFI, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, declaraba públicamente: “Los gobernadores siempre quieren más plata. No hay ninguna posibilidad de que el presidente Milei y el ministro Caputo cedan un ápice en el superávit fiscal. Podrán venir los 24 gobernadores a plantearnos, y cualquier ley que quiera alterar eso será vetada”.
Con pocas expectativas de avances y un diálogo cada vez más desgastado, los gobernadores quedaron en seguir negociando.