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San Fernando del Valle de Catamarca
14 mayo, 2025

Padrinos detenidos: les hallaron más de 20 imágenes de abuso sexual infantil

A cinco meses de denunciado el abuso sexual de una niña de un año y ocho meses, se supo que a los dos sospechosos -sus padrinos-, se les secuestró más de 20 fotos con contenido de abuso sexual infantil.

Ayer, el juez de Control de Garantías Nº 3 Lucas Vaccaroni, les confirmó la detención, al tiempo que la madre de la víctima dio detalles brutales sobre cómo supo de los presuntos abusos y el calvario que debió padecer por parte de personal del Poder Judicial.

En diálogo con El Ancasti, recordó que el sábado 4 de enero a la noche se reunió con los padrinos de la niña y su suegro para comer un asado y, que para aprovechar los descuentos que promocionaba la Provincia, le pidió a su comadre si le podía prestar el celular para averiguar el precio de un teléfono que estaba necesitando.

“Ella se negó. Él (compadre) le dijo que me lo preste y ella me lo dio. A eso de las 2 se fueron de mi domicilio y acompañé a mi suegro porque no le andaba la moto”, agregó.

Dijo que al regresar a su casa, su hermana que había quedado al cuidado de sus hijas, le comentó que por una sospecha, accedió a la galería de fotos del celular prestado y encontró la imagen que derivó en la denuncia.

“Le hizo una captura y cuando llegué, me la mostró llorando. Le pregunté quién era (el de la foto). Ella no sabía. Le mandó un mensaje al compadre y él llegó a los pocos minutos. Le dije: ‘Espero que esa foto no sea de mi hija’, y me respondió que se la habían pasado de Telegram. Pero sabía que la única bebé que llevaban a su casa era mi hija. Entré en una crisis”, relató.

Informó que expulsaron de la casa a los sospechosos y que de inmediato fue a radicar la denuncia penal.

“Fui a una unidad judicial (en el centro) y me dijeron que cómo que no sabía dónde tenía que denunciar estos casos. Me dijeron que como pertenezco a la Unidad Judicial N°10 de Valle Viejo, debía ir para ahí. Y fui, hice la denuncia y sufrí lo peor porque tuve que explicar todo. Me cuestionaron por qué la dejaba a mi hijita y yo jamás pensé que sus padrinos le iban a hacer esto”, manifestó en medio de llantos.

“Confiaba ciegamente en ellos. Mi bebé se enfermaba y ellos estaban afuera del hospital esperando que la retire. Cuando me llevaron a hacer la revisación médica, por calle Esquiú antes de Junín, la revisan a mi hija y me dijeron ‘¿Cómo pensás que un coso (SIC) puede entrar en la vagina de tu hija?’. Se supone que están mejor preparadas que uno. ¿Cómo me van a hablar así? La mujer que me atendió me dijo, ‘¿Cómo sabe tu hermana que el coso es del tipo, si todos los cosos son iguales?'”, agregó.

Consternada, aseguró que no sabía a dónde dirigirse porque “me decían que vaya a mi casa, que cuando haya una novedad me iban a avisar.

Durante una semana fui a la Judicial para ver qué pasaba. Me decían que me quede en casa, que me van a llamar. Un día encontré en el fondo de esa imagen, una foto de mi hija con el tipo durmiendo y la presenté como ampliación de denuncia. Me pidieron que haga imprimir esa foto y a los de la Judicial les dije que cómo podían pensar que yo iba a hacer eso, que me iban a meter presa”.

El maltrato continuó. Contó que luego le dijeron que la denuncia había sido girada a la Unidad de Violencia de Género, donde le informaron que la denuncia había pasado a la Unidad Judicial N°10.

“Volví a la Judicial 10 y me dijeron que no estaba allí, que estaba en la Fiscalía N°2. Me presenté en la fiscalía y me informaron que ahí no había nada. No sabía a quién hablar, hasta que el viernes siguiente el fiscal me dijo que ya habían sido detenidos el miércoles y yo no sabía nada”.

Explicó que podría haber más víctimas porque los sospechosos trabajaban en un comedor de la Costanera, en la Capital, al que concurren menores de edad.

“Son compadres míos, les entregué lo más preciado de mi vida. Mi hija no habla, ya tiene dos años. Se orinaba en la cama después de que en el año y medio dejó de usar pañales. Pido que si hay más niños involucrados que se investigue. Si tuve que esperar cinco meses yendo y viniendo y nadie me dio una respuesta, que hagan algo. Actúen, tienen un montón de pruebas”, finalizó.

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