Este lunes se reiniciaron las audiencias del juicio por la muerte de cinco bebés en el Hospital Materno Neonatal de Córdoba entre marzo y junio de 2022, donde la enfermera Brenda Agüero (29) es la principal acusada.
Lo central de esta jornada es el testimonio de Yoselín Rojas (31), mamá de Angeline, una beba que murió el 6 de junio de aquel año y cuyo caso fue el primero que llegó a la Justicia.
La quinta audiencia comenzó a las 9.30 y hubo una serie de planteos desde la defensa de Agüero, la principal acusada en este juicio. A la enfermera se le atribuye el delito de “homicidio calificado por procedimiento insidioso”, en cinco casos, y “tentativa de homicidio“, en ocho casos.
Yoselín aseguró que tenía 28 años cuando tuvo a Angeline en el hospital y que tenía una hija que en ese momento tenía 9 años.
La mujer es una inmigrante de Perú que llegó a Argentina a buscar mejores oportunidades para su hija, hace siete años.
Contó que durante el embarazo se realizó controles en el Hospital Benito Soria. “Además tengo un médico conocido, que es peruano, y solemos concurrir a él ante cada problema. Mi bebé tuvo todos los controles y nunca detectaron nada malo. Siempre hicimos al pie de la letra los controles, las ecografías, los análisis de sangre, de orina. Mi embarazo marchaba perfectamente”.
La mujer aseguró que, junto a su marido, Jaime Pérez, planearon tener a su bebé y recibieron la noticia del embarazo con mucha alegría. “Yoselín, qué alegría que voy a ser papá”, señaló que le dijo su pareja cuando se enteró de que estaba embarazada, ya que era el primer hijo de él.
Y afirmó que su hija se puso muy contenta por la llegada de su hermanita. “Mi hija me dijo: ‘Mamá, que alegría que voy a tener a alguien en mi vida porque me siento sola y no es lo mismo tener amigas que tener una hermana‘’”, expresó.
Luego relató cómo llegó al Hospital Neonatal a tener a su bebé el 6 de junio de 2022.
“Me preguntaron a dónde quería ir a dar a luz. Yo respondí que tenía buenas referencias del Hospital Materno Neonatal. Opté por ir ahí y como no contaba con un seguro o algo que me pudiera cubrir, llegué ahí”, precisó al señalar que tenía 37 semanas de embarazo cuando acudió a la primera consulta en ese centro de salud.
Yoselín detalló que el día en que llegó a la guardia la recibió una mujer con una bata, pero no puede precisar si era una médica o una enfermera.
Esa mujer le dijo que tenía papeles que no le servían y si podía tirarlos. “Yo estaba con contracciones y mucho dolor y le dije que sí. Después de que pasó todo esto, vi que me faltaban esos papeles importantes. Yo no estaba de acuerdo con que lo tiraran, pero en medio del dolor, le dije que sí. A esa documentación ya no la volví a ver”, puntualizó.
En otro momento de su declaración, la mujer contó que no dejaron que su esposo ingrese a acompañarla en el proceso de parto porque todavía regían las restricciones por el COVID.
Aseguró que se comunicaba con su esposo por WhatsApp. “Él me decía: ‘Tranquila, respirá, no te preocupes, ya te van a atender. En unas horas vas a estar feliz porque vas a tener a tu hija en brazos’”, señaló.
“Mi bebé nació bien, nació sana, era una bebé hermosa. Mi pareja estuvo en la sala de parto el día del nacimiento”, afirmó Yoselín antes de romper en llanto.
Cuando el abogado Carlos Nayi, que la representa en el juicio, le preguntó cómo estaba su hija cuando la vio, respondió: “Era una bebé tan linda, tan maravillosa como me la había imaginado. Al escuchar su llantito por primera vez, me emocionó y en ese momento le agradecí a Dios, y le dije que ya tenía a mi bebé conmigo”, manifestó.
Por otro lado, dijo que en un momento se acercó Brenda Agüero a darles su bebé luego de habérselo llevado apenas se realizó el parto. “Yo me di cuenta que nos miraba raro, como de reojo”, dijo la mamá,
Además, sostuvo que la enfermera se llevó a su beba y volvió a los cinco minutos sin ella.
Luego precisó que, al ver las fotos de la enfermera en los medios de prensa, tras su detención, se dio cuenta de que era quien se había llevado a su hija de la sala de parto.
En la secuencia de los hechos que fue aportando la mujer, indicó que tras la muerte de su niña, con su esposo le pidieron al equipo de salud del hospital que le dieran el nombre de la enfermera que se había llevado a su beba y no se lo quisieron dar.
“En ese momento nos dijeron que no sabían qué había pasado con mi hija, era un caso aislado. Me dijeron que mi caso era muy raro, ellos mismos se sorprendieron”, aseveró.
El debate está a cargo de la Cámara en lo Criminal y Correccional de 7° Nominación, integrada por los camaristas Patricia Soria, José Daniel Cesano y Laura Huberman, con jurados populares.
Además de la enfermera, hay otros 10 acusados, entre ellos el ex ministro de Salud de la provincia de Córdoba, Diego Cardozo.
EMJ