Tras los resultados de las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, el presidente Javier Milei conformó una mesa política nacional y le asignó al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, convocar a una “mesa de diálogo federal” con los gobernadores.
El anuncio de esta mesa se dió luego de las duras críticas del gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, quien acusó al Gobierno nacional de desleal.
En una entrevista radial sostuvo que se siente traicionado por el Presidente en lo que respecta a obras y al electorado, y afirmó: “Me pusieron candidatos que me destrozan y me dicen barbaridades y después pretenden que yo vaya a acompañar”. En tanto, aseguró que es “difícil” que los gobernadores acompañen al gobierno nacional si del otro lado no hay reciprocidad.
“Escucho mucho al Presidente hablar de la lealtad y de que Roma no paga traidores, pero es una avenida de ida y de vuelta. Esto tiene que quedar claro”, afirmó el gobernador.
“Acá hay muchos que hemos acompañado y otros que lo hicieron siempre y se sienten palomas de iglesia, no leones”, dijo Sáenz y agregó: “Pasamos de héroes a villanos. No es que cuando no te acompañamos en algo está todo mal, es porque no estamos de acuerdo, lo que no significa ser un enemigo”.