lunes, 13 de enero de 2025 12:24
La situación, que generó una fuerte repercusión entre los trabajadores, fue reportada por El Esquiú Play, que estuvo presente en el lugar y dialogó con las personas damnificadas.
En ese sentido, Paola, una de las empleadas afectadas, relató lo ocurrido: “Hoy nos presentamos, después de volver de nuestras vacaciones en diciembre, y nos encontramos con que no pudimos ingresar. El guardia tenía un listado y 20 de mis compañeros no pudimos pasar. En el telegrama nos dicen que es porque terminó nuestro periodo de prueba, algo que nunca nos informaron”, dijo.
El grupo de trabajadores había retornado a sus puestos tras las vacaciones, bajo la promesa de que serían absorbidos por la nueva gestión de la fábrica, sin la condición de estar en un periodo de prueba. “La promesa era que todos los ex-empleados de Texilcom íbamos a seguir trabajando sin que se produjeran despidos, ya que el acuerdo con el gobierno lo impedía”, afirmó Paola.
Además, la trabajadora señaló que el acuerdo firmado con el gobierno estipulaba que, durante 20 meses, no podían ocurrir despidos sin causa justificada. Sin embargo, la empresa argumentó que los despidos se debían al término del periodo de prueba de los empleados, algo que no había sido comunicado previamente.
La situación también se agravó por los retrasos en el pago de salarios y beneficios. “Nos deben el mes de diciembre, las vacaciones y el proporcional del aguinaldo. Nos fuimos el 23 de diciembre sin un peso y volvimos hoy sin trabajo,” relató Paola, quien también destacó que desde que comenzó la nueva etapa de la fábrica, nunca se pagaron los salarios a tiempo.
Por su parte, los empleados afectados contaron con la presencia de la Dirección de Inspección Laboral (DIL) y de la secretaria del sindicato, quienes intentaron obtener explicaciones del gerente de la empresa. “La DIL va a hablar con el gerente para entender las razones del despido. Mientras tanto, estamos esperando a que nos den más información, especialmente sobre cuándo nos pagarán lo que nos deben,” comentó Paola.
En cuanto a la situación interna de la fábrica, Paola afirmó que la producción nunca estuvo completamente detenida, aunque sí hubo paros debido a problemas con los pagos. “La producción siempre estuvo, aunque no al 100%. El dueño de la marca había desmentido nuestras denuncias, pero nosotros estábamos en paro mientras él decía que todo estaba bien,” indicó.
Los empleados, aún sin una solución clara, esperan las indicaciones del abogado del sindicato para definir los pasos a seguir. “Vamos a esperar el consejo legal, pero si la DIL y el sindicato nos respaldan, vamos a actuar como corresponde,” concluyó Paola.
La situación ha generado malestar entre los trabajadores, quienes ahora enfrentan no solo la incertidumbre laboral, sino también la falta de pagos y la amenaza de nuevos despidos. En total, la empresa aún mantiene alrededor de 70 u 80 empleados en su planta.
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