domingo, 7 de julio de 2024 01:20
La UCR y su rumbo
¿Hacia dónde va la Unión Cívica Radical? El partido fundado en 1891 no acierta a encontrar su rumbo, ni ha logrado recuperarse desde la crisis de 2001, cuando Fernando De la Rúa, el último presidente radical, debió renunciar por la crisis económica. En los años siguientes ni siquiera se acomodó en un buen rol opositor, quedó como un espectador de lujo de las disputas de poder, y en la última década se enfocó en obtener algunos cargos menores, situándose casi como dama de compañía del poder de turno, Mauricio Macri antes y Javier Milei ahora. Tanto decayó como opción política que en la última elección presidencial ni siquiera tuvo un candidato al sillón de Rivadavia, y se conforma con acoplarse a coaliciones que nunca dirige y que, en ocasiones, van com plataformas muy lejanas a la doctrina histórica radical. Hoy el panorama no refleja ningún síntoma de mejora. La UCR se alineó en el Congreso de la Nación con la bancada libertaria, incluso con algunas puestas en escena patéticas, con sus legisladores simulando enojos y rechazos en sus discursos para luego votar a favor, mientras el presidente del partido, Martín Lousteau, vota en contra pero asegurándole el quórum al oficialismo. Mientras tanto, otros dirigentes pululan sin fuerza ni orden de mando, licuando la fuerza que alguna vez el partido supo tener. No es muy disímil el escenario en Catamarca, donde la UCR se ubicó tercera cómoda en los comicios de 2023, y ahora llama a la conformación de un gran frente opositor, lo cual no deja de ser una admisión de la propia impotencia para disputar el poder en soledad.
No hay proyecto
Se llega y se mantiene esta indeseable posición partidaria porque no hay proyecto, no hay una propuesta radical, no hay un plan de provincia o país. La dirigencia se durmió en el rol de comentarista de lo que sucede, reparte críticas, arma reuniones, pero no tiene cómo conquistar a un electorado que le da la espalda hace décadas. Tampoco tiene liderazgos, y se malogra cualquier esfuerzo en internas salvajes e inconducentes.En la medida que el radicalismo no trabaje sobre ideas propias, y mientras vaya siempre corriendo desesperado detrás del ganador de turno, le será muy difícil revertir su opaco presente y mostrar una identidad propia en la provincia y el país.
Gigante en problemas
En 1980 Loma Negra inauguró la planta de cemento modelo en el departamento El Alto, en lo que significó el comienzo del sueño de industrializar la provincia de Catamarca. El gigante que dirigía la empresaria Amalia Fortabat, junto con la textil Alpargatas, hacían presumir que llegarían tantas empresas como para modificar el panorama productivo provincial. Detrás de los dos grandes asentados aquí, se diseñaba el Parque Industrial El Pantanillo, que esperaba recibir cientos de proyectos de la mano de la Ley de Promoción Industrial. La explosión nunca se produjo, y cuando la norma de exenciones impositivas caducó, 30 años después, quedaban un puñado de empresas en el área industrial. Pero Loma Negra se quedó, con una fortaleza capaz de timonear cualquier crisis. Pionera en la industria del cemento en la Argentina, ahora acusa la crisis generada por Javier Milei con la paralización de la obra pública, una forma de entender que las variables económicas que se conocen día a día no son sólo números.
¿Se vende?
Loma Negra se apresta a cambiar nuevamente de manos y podría volver a accionistas argentinos por las millonarias deudas de su dueña, el holding Intercemento de Brasil que pertenece a la familia Camargo Correa. Los accionistas brasileños que poseen la firma que fue, desde su nacimiento hace casi un siglo hasta 2005 de Amalita, analizaron la posibilidad de venderla a otra brasileña, la Compañía Siderúrgica Nacional, la principal siderúrgica de Brasil, que figura entre las más grandes de América Latina. Y hasta les dieron tiempo para decidirse hasta el próximo viernes 12. En ese corto intervalo hay una fuerte presión por la deuda de los dueños de Loma Negra que en el mercado calculan en torno a US$ 1.500 millones. El banco brasileño BTG Pactual es el encargado de la negociación. El año pasado la facturación de Loma Negra ascendió a $ 422.161 millones y despachó 6,4 millones de toneladas de cemento, una cifra que no alcanzará este año por el derrumbe de ventas dado el freno de la obra pública y la caída de actividad que impacta en la obra privada. Desde 2017 Loma Negra cotiza en Wall Street. Y ahora se desprende del paquete de control que es el 51%. El resto, flota en la Bolsa. Trascendió que la cifra llegaría a US$ 700 millones. Las deudas pesan a tal punto que este holding de las hermanas Camargo Correa inició un plan global de desinversión. En junio del año pasado la compañía china Huaxin Cement Co se quedó con sus operaciones en Mozambique y Sudáfrica. La firma emplea a 2.906 personas, 1829 en Loma Negra y otras 1.077 en Ferrosur. Un gigante que tampoco escapa al castigo de las políticas libertarias.
Recuerdos
Hace exactamente diez años moría Alfredo Di Stéfano, la “saeta rubia”, considerado uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos. Jugó en River Plate, Huracán y Millonarios de Colombia, pero debe su fama a su mágico paso por Real Madrid, donde ganó la actual Champions cinco veces consecutivas. Defendió además las camisetas de la Selección Argentina y de la Selección de España, ya que la reglamentación era distinta a la actual.? Fue galardonado por la revista France Football como el mejor de todos los ganadores del Balón de Oro hasta 1989, circunstancia por la que recibió el Súper Balón de Oro, siendo el único futbolista de la historia en poseerlo. Expertos, exfutbolistas y aficionados lo señalan como el jugador más completo que ha dado el fútbol a nivel mundial. En 1963 fue secuestrado en Caracas por las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional de Venezuela (FALN), como parte de una estrategia publicitaria del grupo armado. Fue liberado a los tres días sin sufrir ningún daño. Curiosidades finales: por diversas circunstancias nunca pudo jugar en un mundial, ni siquiera un partido. Sin ser goleador, anotó 694 tantos en 898 partidos oficiales. Fue también un exitoso director técnico, el único de la historia que se consagró campeón dirigiendo a Boca y a River. Ganó 26 títulos como jugador y otros 7 como técnico. Fue nombrado Presidente de Honor del Real Madrid, cargo que mantuvo hasta el final de sus días.
El Esquiú.com