22.1 C
San Fernando del Valle de Catamarca
sábado, 21 septiembre, 2024

Que no decaiga

martes, 18 de junio de 2024 00:21

En diciembre de 2020 se lanzó el Consejo Regional del Norte Grande Argentino, entidad que logró nuclear a los gobernadores de diez provincias argentinas, a saber, Catamarca, La Rioja, Tucumán, Salta, Jujuy, Santiago del Estero, Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones. El encuentro fue auspicioso porque tenía cierto carácter inédito en el contexto de ásperos enfrentamientos político-partidarios en el país. Pero, de alguna forma, mandatarios de distintas extracciones ideológicas comprendieron y alentaron un trabajo común, a sabiendas de que unidos ganaban fuerza para avanzar con reclamos y gestiones y que, en definitiva, más allá de algunos matices, comparten anhelos y problemáticas. El Norte argentino no es una región para despreciar, por todo lo que históricamente aportó y por lo que sigue representando para la Nación en su conjunto.

*****

En los siguientes cuatro años, se desarrollaron 18 reuniones del Norte Grande, casi a razón de 5 por año. Lograron que el Presidente de la Nación, Alberto Fernández, no sólo se les uniera, sino que reconociera la eterna e injusta postergación de la región, que carga con todas las desventajas de haber quedado lejos del puerto y de padecer en todos los casos el costo extra de traslados y logística; por no mencionar las inequidades en materia de oportunidades de desarrollo y otras dificultades en relación con el panorama histórico de la Pampa húmeda y las grandes urbes. 

*****

A más de seis meses de gestión de Javier Milei, el Norte Grande concretó una única reunión en Salta, allá por marzo, y su agenda parece comenzar a desinflarse. Aquella vez no asistió el Presidente sino su ministro del Interior Guillermo Francos, hoy jefe de Gabinete, con quien la agenda planteada retrocedió visiblemente. Lejos de atender las demandas provinciales, Francos procuró avanzar entonces en la suma de voluntades para el ya frustrado Pacto de Mayo, y el consejo no se volvió a reunir. El organismo interprovincial no desapareció ni se rompió, pero claramente ha perdido ímpetu y confianza. Sus integrantes empiezan a sentir los efectos del distanciamiento político, no sólo por las diferentes procedencias, sino por comportamientos de mandatarios de un mismo partido que generan roces. Con todo, sería importante que la idea original perdure y se fortalezca nuevamente. Porque las desigualdades históricas no han cambiado, y si quiere revertirlas, el Norte del país no puede darse el lujo de dividirse otra vez.

El Esquiú.com

Mas noticias
NOTICIAS RELACIONADAS