Si hay algo que caracteriza a Pamela David es su sinceridad y la particularidad de reconocer que le pasa, vive y atraviesa las mismas cosas que otras mujeres. Por eso, una vez más, la conductora trajo al aire de Desayuno cómo maneja y se siente en una situación particular.
En tanto Natalie Weber compartió un fragmento en el que Momi Giardina se refería a la forma en que le afectaban los “días femeninos” a su cotidianidad, la esposa de Daniel Vila no solo concordó con la bailarina sino que amplió de qué forma lo maneja en su caso.
Tras escuchar a la integrante de Luzu decir que cuando se indispone su estado emocional fluctúa mucho, Pamela reconoció que ella le hace un particular pedido a su familia para que el mal humor no perturbe el hogar. “Cuando tenemos nuestros días, hay minas que se ponen muy ováricas”, disparó la mujer de Mauro Zárate.
A lo que Pamela reconoció: “Es mi caso… Yo, muy. En mi casa se dan cuenta todos. Yo soy peor que Momi. Soy el demonio de Tazmania. ¡No me hables! Tengo la aplicación en el teléfono y les aviso. No se me acerquen. No me contradigan”.
PAMELA AVISA, NO TRAICIONA
“Se callan. No me hablen”, sentenció la conductora de las mañanas de América quien, de esa forma, sería como el que avisa no traiciona. Por su parte, Weber manifestó: “Hay una frase que molesta muchísimo, no la digan, y es cuando la mujer te pone los límites. `¿Qué te pasa? ¿Estás indispuesta?`. No lo digan. Eso, sopapo”.
Sin dudas, Natalie es de épocas pulgas en esos días femeninos y le advirtió también a su marido qué cosas mejor no le diga. “No se dice nada, se calla todo. Muditos. ¡Y no se abraza cuando el otro come!”, disparó David a modo de cierre del debate.