Embelesados hasta la médula. Así les fascina exhibirse, por eso cargan toneladas de fotos sonrientes, abrazados, imantados y enamorados todos los santos días. La China Suárez y Mauro Icardi profundizan esa tendencia de gritarle al mundo que se aman con locura.
Desde que Wanda Nara llamó, de urgencia, a la policía para desalojar al futbolista de su piso en la torre Chateau de Núñez, allá por fines de noviembre, se produjo como efecto residual, o colateral, el inesperado romance con María Eugenia, que prosigue en el presente.
La actriz y el delantero lucen como envueltos en un hechizo mágico de amor, por lo cual comparten todas las horas de cada jornada, ya sea en la piscina de la mansión de Mauro como en los viajes opulentos en avión privado por destinos obnubilación como Milán o Estambul.
Claro que los tortolitos no querían perderse un día tan especial, cargado de simbolismo, como San Valentín y se encargaron de mostrarse juntos, pegaditos de la mano, absortos en las mieles del enamoramiento. Por eso, la China e Icardi salieron a pasear por la zona más concurrida de Buenos Aires: Palermo.
LE GRITARON ‘AGUANTE WANDA’ EN LA CARA A LA CHINA SUÁREZ Y MAURO ICARDI
En las antípodas del perfil bajo, la pareja caminó por las calles más transitadas de la ciudad, en una especie de declaración, de maniobra para ser vistos y que todo el planeta los pudiera divisar con claridad absoluta. Ahí, en ese barrio vivieron una situación desagradable para sus anhelos.
Obviamente los medios se enteraron de ese paseo romántico, por eso LAM los encontró en la puerta de un bar e intentó conseguir algunas declaraciones, mientras corrían bajo la llovizna hacia una camioneta. En ese interín, el cronista Santiago Riva Roy confirmó el escrache que le pegaron a Icardi y Suárez: “‘Aguante Wanda’, grita la gente”.