Lionel Messi ya está en condiciones de cerrar su próximo destino. A partir de este martes 1° de julio, el capitán de la Selección Argentina ingresó en los últimos seis meses de su contrato con Inter Miami, lo que significa que puede firmar con cualquier club del mundo y marcharse libre a fin de año, según lo estipulado por el reglamento de la FIFA.
Esta posibilidad aplica tanto para futbolistas sin club como para aquellos cuyo vínculo expira en los próximos seis meses. En ese escenario, el club de origen no percibe compensación económica si el jugador decide firmar con otra institución, algo que en este caso podría significar un enorme impacto para el equipo estadounidense.
Messi, cuyo contrato con las Garzas concluye oficialmente el 31 de diciembre, todavía no definió su continuidad. Aunque en lo formal continúa ligado a la MLS, el contexto deportivo y la falta de competitividad del Inter Miami podrían inclinar la balanza hacia una salida anticipada.
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En este marco, Al-Hilal de Arabia Saudita ya habría iniciado contactos para seducir al rosarino con una oferta millonaria. Desde lo emocional, en Rosario tampoco pierden la esperanza: Newell’s sueña con convencerlo para que dispute el semestre previo al Mundial 2026 con su camiseta, un deseo potenciado por los regresos de otras figuras como Ángel Di María a Central y Leandro Paredes a Boca.
La cercanía con la Copa del Mundo que se jugará en Estados Unidos, México y Canadá también será clave en la decisión.
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La millonaria cifra que puede perder Inter Miami si se va Messi
Para la MLS, perder a Messi implicaría una caída abrupta en sus ingresos. Desde su llegada a Miami, el argentino generó cerca de 300 millones de dólares: 265 por ventas de entradas y casi 30 por suscripciones al MLS Season Pass a través de Apple TV, según datos del diario Sport.
Si bien aún restan seis meses para que finalice su vínculo, los próximos días podrían ser decisivos. La dirigencia del club tiene como prioridad retenerlo, pero la “Pulga” ya tiene el derecho de avanzar por su cuenta y planificar lo que podría ser su último gran desafío como futbolista profesional.
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