Vecinos de Collagasta y Sierra Brava, en el departamento Fray Mamerto Esquiú, expresaron su indignación ante el deterioro del servicio de transporte público en la zona, con denuncias que incluyen unidades en mal estado, recorridos inseguros y abandono oficial. Silvia, una de las referentes del reclamo, se convirtió en portavoz de la comunidad al visibilizar una situación que afecta especialmente a personas mayores, con discapacidad y trabajadores que dependen del colectivo para su día a día.
“Nos dejan a pie, pasan de largo o directamente se rompe el colectivo en el camino”, denunció Silvia, quien relató que incluso fue ignorada por una unidad que simplemente no se detuvo a levantarla. La vecina también advirtió sobre los riesgos del nuevo recorrido hacia Sierra Brava: “Es un peligro por donde están entrando, no hay mantenimiento ni condiciones de seguridad”. Según explicó, la falta de infraestructura y la precariedad de los vehículos ponen en riesgo la integridad de los pasajeros.
Uno de los puntos más graves del reclamo tiene que ver con el trato hacia personas con discapacidad: “Están bajando a personas discapacitadas si no llevan el documento junto con el carnet”, denunció. Además, el servicio nocturno, que había sido suspendido durante la pandemia, nunca fue restablecido. “Ese recorrido era fundamental para muchos vecinos que trabajan o estudian y vuelven tarde”, lamentó.
Pese a las reiteradas notas presentadas, la primera el 15 de mayo, firmada por toda la comunidad, hasta el momento no hubo respuestas oficiales por parte de las autoridades de Transporte. Silvia también denunció que fue maltratada al intentar hacer una denuncia personal y no pudo comunicarse con ningún responsable. “Pedimos 3 kilómetros de asfalto para Sierra Brava y que, por favor, controlen el servicio. No queremos promesas: los necesitamos acá, no en las oficinas”, reclamó con firmeza.