El dirigente social Juan Grabois fue detenido este sábado luego de ingresar junto a un grupo de militantes al edificio donde funcionaba el Instituto Juan Domingo Perón, recientemente disuelto por el Gobierno nacional. La medida generó un fuerte operativo de la Policía Federal, que procedió al desalojo del inmueble.
Desde el entorno del referente de Patria Grande, informaron a Noticias Argentinas que se trató de una “ocupación pacífica para denunciar” la decisión del Ejecutivo de cerrar el instituto, y señalaron que “no hubo orden de desalojo”.
A través de su cuenta en la red social X, Grabois había anunciado la acción, en la que expresó: “Hace minutos la juventud del movimiento nacional recuperó del odio gorila la antigua residencia de Perón y Evita donde funcionaba el instituto de estudios Juan Domingo Perón disuelto ilegalmente por el régimen de Milei”.
La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, acusó a Grabois y sus militantes de “irrumpir con violencia” en el edificio y compartió un comunicado oficial donde justificó el cierre del organismo.
Según el texto difundido por el Ministerio de Capital Humano, el Instituto Juan Domingo Perón contaba con 20 empleados y representaba un gasto de más de 400 millones de pesos anuales. Además, se afirmó que el presupuesto del instituto estaba destinado exclusivamente a “salarios y servicios básicos”, y que no se habían producido investigaciones conforme al objetivo original del organismo.
También se detalló que, tras la disolución, se tomaron medidas para “resguardar el patrimonio histórico y cultural”, con la totalidad del material inventariado y en proceso de derivación hacia la Biblioteca Nacional y el Archivo General de la Nación.
El Ejecutivo formalizó la disolución mediante el decreto 346/2025, que incluyó también la eliminación de la Comisión Permanente Nacional de Homenaje al Teniente General Juan Domingo Perón.
Tras conocerse la noticia, el Partido Justicialista (PJ) denunció una “persecución ideológica” por parte del Gobierno, calificando de “discrecional y abrupto” el cierre de los institutos vinculados a la memoria del expresidente. Además, propuso que el PJ, encabezado por Cristina Kirchner, asuma la custodia del patrimonio de los organismos clausurados.