jueves, 24 de abril de 2025 17:45
El oficialismo celebra un aumento del 7% en los salarios reales privados registrados respecto a noviembre de 2023, pero este incremento no se debe a verdaderos aumentos salariales en las paritarias, que siguen restringidas. Según informes, el verdadero motor de este crecimiento es el incremento del 5,1% en las horas extra trabajadas durante el mismo período.
La administración del actual gobierno, que promueve políticas de mercado libre y sostiene que la inflación es un fenómeno exclusivamente monetario, impone un techo a las paritarias, limitando así los aumentos salariales por debajo de la inflación mensual. Desde enero, los acuerdos salariales se han cerrado consistentemente por debajo de la tasa de inflación, aunque el Ministro de Economía, Luis Caputo, ha destacado en redes sociales que “el salario real privado registrado está en su máximo nivel desde agosto de 2018”.
A pesar de estos alardes, investigadores del Programa de Capacitación y Estudios sobre Trabajo y Desarrollo (CETyD) de la Universidad Nacional de San Martín cuestionan esta narrativa, observando que el aumento del poder adquisitivo se ha logrado principalmente por la intensificación del trabajo y no por incrementos legítimos en los salarios negociados. Entre 2023 y 2024, el empleo formal cayó un 2,3%, mientras que las horas extra se incrementaron en un 5,1%, indicando que los trabajadores están aumentando su carga laboral en lugar de recibir aumentos significativos en sus salarios.
La preocupación por esta situación radica en la precarización que conlleva. Aumentar las horas extra trabajadas puede resultar inestable, y normalmente es el primer componente que se reduce en tiempos de baja actividad económica. De hecho, los trabajadores que buscan compensar ingresos bajos recurren a pluriempleos, lo que alimenta el total de la masa salarial medido por el SIPA.
Los analistas advierten que, aunque el gobierno se atribuye el “logro” del aumento salarial, la realidad es más compleja. La mejora en los salarios no proviene de un avance en las negociaciones paritarias libres, sino de un contexto de sobrecarga laboral y condiciones de trabajo precarias.
Juan Manuel Ottaviano, abogado laboralista y miembro del CETyD, señala que las políticas actuales favorecen una “intensificación de la mano de obra” y generan más desigualdad en el mercado laboral. “La recuperación salarial que se obtiene a través de horas extra y pluriempleo no augura prosperidad, sino un modelo que redistribuye las penurias en lugar de asegurar derechos”, concluye.
Esta situación plantea interrogantes sobre la sostenibilidad del crecimiento económico en Argentina y la calidad de vida de sus trabajadores, que enfrentan desafíos laborales crecientes sin los beneficios de acuerdos salariales robustos.